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Inshore

MINE von MOYEUVRE-GRANDE - Frankreich

Die Aktivitäten im Bergbau sind rückläufig und das nicht nur in Deutschland. Überall werden Bergwerke geschlossen. Was aber geschieht mit den aufgefahrenen Stollen und Schächten. Wie aus Presseinformationen zu entnehmen ist, kommt es immer wieder zu unvorhergesehenen Einbrüchen und Absackungen oder wie in Frankreich passiert zu Überflutungen von Kellern der im Tal stehenden Häuser. Um der Ursache für den anstehenden Wasserdruck auf den Grund zu gehen wurde die Nordseetaucher GmbH März diesen Jahres beauftragt eine Untersuchung in Zusammenarbeit mit dem Unternehmen INSERBAT aus Forbach, Frankreich durchzuführen.

Das Eisenerzgrube von Moyeuvre Grande liegt zwischen Metz und Thionville in Frankreich und ist seit einigen Jahren stillgelegt. Anfänglich passierte nichts, das Wasser das aus dem Berg lief konnte ohne Probleme abgepumpt werden. Dann jedoch passierte es und die ersten Häuser am Hang sackten langsam ab. Sie wurden darauf geräumt und verschlossen. In den Häusern im Tal drückte sich immer öfter Wasser durch die Kellerböden. Die Pumpen im Bergwerk schafften es nicht mehr das aufkommende Wasser abzupumpen. Eine Erklärung woher das viele Wasser plötzlich kommt gab es und gibt es bisher nicht.

Da die Stollen noch immer ab einer gewissen Tiefe geflutet sind, die Betreiber des Bergwerks, die Bergbaubehörden des Landes und auch die Gemeinde Moyeuvre Grande aber der Ursache auf den Grund gehen wollen und müssen, gab es keine andere Möglichkeit als eine Untersuchung mit Hilfe von Tauchern und ferngesteuerten Kameras (ROV) durchzuführen.

Auf Grund unserer Erfahrungen bei Taucherarbeiten im Bergbau wurden wir von den Franzosen gebeten diese Untersuchung auszuführen. Der Einstieg in den Stollen erfolgte in der Nähe des Bahnhofs Mitten im Wohngebiet auf einem Gehweg. Vom Gehweg ging es hinab durch einen 1 m breiten Schacht in den darunter liegenden Zugang zum Stollen mit einer Höhe von 2,5 Meter. Am Ende des Zugangs wurde die Kommando zentrale eingerichtet von der aus die Aktion begleitet und überwacht wurde. Die Bewetterung wurde installiert, eine mobiles Kunststoffponton in Einzelteilen hinabgelassen und zusammengebaut, Computer für die Steuerung des ROV "Hyball" eine ferngesteuerte Kamera und das Sonar wurden vor Ort gebracht sowie die Ausrüstung für die Taucher.

Eine erste Erkundung wurde von Andreas Stutz mit Hilfe des ROV "Hyball" durchgeführt mit dem Ergebnis, dass ein Abstieg in die unter dem Stollen liegende Galerie nicht möglich war. Also fuhren wir weiter mit der Kamera in den Berg bis ROV "Hyball" zum nächsten Abzweig nach ca. 100 Metern. Von hier aus war der Einstieg bedingt möglich. Zunächst mußte das ROV ein paar Gesteinsbrocken beräumen um weiterfahren zu können. Dann machte sich der Taucher klar, um das Kabel der ferngesteuerten Kamera an dieser schwierigen Passage zu führen.. Die Kamera fuhr nun immer weiter und tiefer in den Berg und filmte den aktuellen Zustand und immer wenn es besonders interessant war und/oder wir nicht mehr genau wußten wo es weiter geht, wurde das Sonar eingeschaltet und lieferte uns ein genaues Abbild der Umgebung.

Es wurden auf diese Weise insgesamt 4 Stollen untersucht und der am weitesten entfernte Punkt war 245 Meter vom Eingang. Der Taucher befand sich die ganze Zeit über an der Durchgangspassage und war 120 Meter weit im Berg. Große Stolleneinbrüche konnte nicht festgestellt werden. An Hand von Wasserproben die vom Taucher gezogen wurden soll nun im nachhinein festgestellt werden woher das Wasser stammt, dass den Leuten im Tal so zu schaffen macht.

MINA de MOYEUVRE-GRANDE – Francia

No sólo en Alemania, sino en todas partes del mundo está decreciendo la actividad en las minas y se cierran muchas de ellas. La pregunta sin embargo es qué ocurre con los túneles, las galerías y los pozos. De vez en cuando la prensa saca a la luz historias sobre súbitos hundimientos o, lo que sucedió en Francia, que se inundaron los sótanos de casas situadas en un valle de una otrora región minera. En marzo de 2004 Nordseetacher fue contratada por INSERBAT de Forbach, en Francia, para investigar las causas del incremento de la presión del agua en las proximidades de una mina fuera de servicio.

La mina de hierro en Moyeuvre Grande, localizada entre Metz y Thionville en Francia se cerró en 1977. Al principio todo fue bien: el agua que emanaba de la montaña fue bombeada sin que surgieran problemas. Pero inesperadamente las casas de la montaña comenzaron a hundirse. Sus habitatantes fueron evacuados y las casas cerradas. Los bajos y sótanos de las casas situadas más abajo comenzaron a inundarse. Las bombas en la mina no conseguían extraer toda el agua que se acumulaba allí y nadie podía explicar de donde exactamente provenía tanta agua.

El explotador de la mina, las autoridades mineras y el concejo municipal de Moyeuvre Grande querían por todas llegar al fondo del problema, pero así que los pozos por debajo de una determinada profundidad estaban inundados, no había otra opción que no fuera llevar buzos expertos y cámaras operadas a distancia (ROV) para examinar la mina.

Debido a nuestra experiencia con trabajos de buceo en la minería, los responsables del proyecto nos pidieron llevar a cabo esta misión. La entrada del pozo estaba localizada en las proximidades de la estación ferroviaria de la ciudad, en el fondo de un agujero en el pavimento en medio de una zona residencial. Por debajo del pavimento había un túnel de 1 metro de ancho que llevaba a una entrada del túnel en la galería principal, cuyo techo tenía una altura de 2,5 metros. Montamos el centro de operaciones en esta entrada del túnel y desde aquí toda la misión pudo ser monitorizada y controlada. Se instaló un sistema de ventilación, un pontón móvil de plástico se bajó a piezas y se montó bajo el suelo, una computadora para el control del “Hyball” ROV, la cámara operada por remoto, el sonar y el equipo de buceo, todo ello fue bajado e instalado.

El reconocimiento inicial ejecutado por Andreas Stutz con la ayuda del “Hyball” ROV, resultó en la incapacidad de llegar a la galería situada debajo del túnel. Continuamos pues con la ayuda de la cámara a través del túnel 100 metros más hasta la siguiente bifurcación. Aquí la entrada se hizo posible después de que la cámara despejara algunas piedras de gran tamaño. Entonces el buzo pudo pasar el cable de la cámara a través de esta sección terriblemente difícil. Hecho esto la cámara teledirigida pudo descender cada vez a mayor profundidad y devolvernos imágenes de la situación de los alrededores. En aquellos sitios que parecían importantes o en los que no estaba claro cómo continuar, poníamos en marcha el sonar, que nos daba una imagen precisa de las inmediaciones. 

Utilizando este método, pudimos examinar un total de cuatro túneles y el punto a más distancia estaba a 245 metros desde la entrada. Durante toda la misión, el buzo estuvo sumergido en le pasaje y llegó a 120 metros en el interior de la montaña. No detectamos ningún signo de derrumbamientos graves de la mina. Lo siguiente es examinar las muestras del agua extraídas por los buzos para ver si pueden aclarar de donde proviene el agua que sigue inundando el valle.